Arranca con fuerza la novena edición de Educacine
Arranca con fuerza la novena edición de Educacine
El primer día de la novena edición del Festival Educacine contaba con la asistencia de Rodrigo Cortés, director del film inaugural, “El amor en su lugar”, y los ejecutivos Carlos Martínez Domínguez y Ana Belén Arcones, fundadores de la escuela de negocios IMF Smart Education, que han presentado el film francés “Un nuevo mundo”, de Stéphane Brizé.
“Mirad más allá de la pantalla del móvil durante un par de horas” y “ensanchad los horizontes de vuestra mente a la hora de contemplar el mundo”. Con estas palabras, José María Aresté, director de decine21, ha dado este lunes el pistoletazo de salida a la novena edición del Festival Educacine. La cita, organizada por este portal y el diario Magisterio, va a reunir toda la semana a miles de alumnos y profesores en las salas del cine Verdi en Madrid, con el objetivo de hacer pensar a las futuras generaciones a través del séptimo arte.
El film encargado de comenzar con esta tarea ha sido El amor en su lugar. Su director, Rodrigo Cortés, no ha querido faltar al evento, no solo para dar a los estudiantes una visión diferente del holocausto nazi, sino también para reivindicar la forma de ver el cine de toda la vida frente a las posibilidades de las nuevas plataformas.
“Os invito a comprobar la diferencia de ver una película en una sala, donde el sonido os rodea y envuelve, y no en la televisión, en casa, mirando cada dos por tres al WhatsApp. Es una experiencia totalmente distinta tanto en sonido como a nivel de imagen. Una sala te atrapa, apaga el mundo, que se detiene durante dos horas. La película se vive casi en primera persona, es una experiencia física inmersiva”, ha destacado el cineasta.
El amor en su lugar lleva al espectador hasta el ghetto de Varsovia, donde una compañía de teatro estrena la obra musical del mismo nombre. La acción teatral, cargada de positivismo y alegría, se mezcla con las historias personales de sus protagonistas, que luchan por sobrevivir en tiempos de los nazis. El amor, las ganas de seguir con vida y el miedo a la muerte guían a los personajes durante los 91 minutos en los que se prolonga la historia.
Llama la atención el modo en que está rodada la película: la acción sucede en tiempo real. La narración comienza con un plano secuencia que sigue a la actriz protagonista hasta que llega al teatro, y a lo largo de la historia el director logra transmitir el caos y las dudas que reinan en la cabeza de la intérprete mediante singulares movimientos de cámara.
Precisamente, durante el coloquio posterior al visionado, en el que los alumnos se han mostrado muy interesados, Cortés ha hecho hincapié en esa mezcla entre la ficción de la obra de teatro dentro de la película y la historia de los protagonistas. “Hay diferentes lenguajes: el optimista de la función y el de los actores viviendo y reaccionando en la vida real, cargado de drama, de suciedad. Otra cosa es lo que ve el espectador”, ha afirmado.
La película, tal y como ha reconocido su creador, resulta “claustrofóbica en muchos sentidos”. “Apenas se ve el sol”, destaca. Una estrategia totalmente intencionada para que el espectador se ponga en la piel de los protagonistas, que se enfrentan a una dura decisión: huir y salvar sus vidas o permanecer, por amor, en un lugar donde probablemente mueran.
Claves del mundo empresarial
La jornada inaugural ha concluido con el encuentro de los fundadores del IMF con los asistentes, tras la proyección de la mencionada Un nuevo mundo, en la que Vincent Lyndon da vida a Philippe, un empresario que afronta su divorcio al tiempo que la multinacional en la que trabaja afronta un momento complejo.
“Los empresarios tienen que ganar dinero, sino no existirían, pero no debemos olvidar la función social que tienen” apunta Carlos Martínez Domínguez. “Al final cuanto más motivado esté el trabajador, mejor va a cumplir su labor. En la película vemos un ejemplo de lo que no se debe ser, porque se trata mal a la gente cuando los resultados son positivos. En una tendencia alcista, no se entiende de ninguna manera. Ahora que los niveles de empleo son altos, la gente acabará abandonando la empresa. Uno de los mayores valores de las empresas es el talento”.
Han recordado Ana Belén Arcones y Martínez Domínguez que fundaron IMF con más ilusión que medios. “Perseguíamos un sueño, éramos dos profesores bien valorados por los alumnos. Montamos una pequeña oficina, y éramos expertos en Riesgos Laborales. Al final decidimos que queríamos decantarnos por la educación online. Veníamos de estudiar en ICADE, y habíamos pagado un dineral por un Master, pero queríamos que la gente con menos recursos pudiera formarse. Al final hemos llegado a facturar cerca de 42 milllones de euros, que no es lo que ingresa la multinacional que se ve en la película pero no está mal”.
“No hemos tenido padrinos, no hemos tenido apoyo exterior ni institucional, ni de ningún banco”, añade Martínez Domínguez. “Sólo hemos contado con la ayuda de nuestros colaboradores y amigos, y al final creo que hemos sacado adelante un proyecto bonito. Cualquiera con un poco de suerte, un poco de talento y muchísimo trabajo puede sacar un proyecto adelante. Los sueños se cumplen. Cuando empezamos en el año 2000 con el proyecto no pensábamos que iba alcanzar esas cifras. Teníamos 10.000 estudiantes al año y 300 personas trabajando para la empresa, y aparte unos 300 profesores”.
En la película se reconstruye un proceso de reducción de empleos. Arcones y Martínez Domínguez se han enfrentado a lo largo de dos décadas a momentos complicados. “Atravesábamos una mala racha, y llegamos a pensar en acometer despidos. Pero al final redujimos los salarios, incluido el nuestro, durante un tiempo. Los trabajadores perdieron un cinco por ciento y nosotros un veinte. Teníamos pérdidas. Fue un período muy complicado, y ganamos menos durante dos o tres años, pero al final las cosas salieron como tenían que salir y pasamos el bache”, señala Arcones. “Al final tienes que cuantificar si tener éxito en la vida es ganar dinero, o hay cosas más importantes. A nosotros nos preocupa más la gente”.